Hacer cerveza es una labor divertida y satisfactoria que, sin embargo, requiere mucha atención y cuidado. Conforme vayas dominándola, probarás distintas recetas y, poco a poco, perfeccionarás su sabor; pero debes saber que hay cosas con las que debes prestar especial atención desde el principio para no arruinar tu lote. Te dejamos con las cosas que un cervecero debe evitar:
-
No desinfectar apropiadamente
Lo más importantes es contar con equipo debidamente desinfectado. Asegúrate que todo esté esterilizado, particularmente tu contenedor. No hay nada peor que una cerveza echada a perder por contaminación. Así que, antes de comenzar, dedícale buen tiempo a limpiar tu equipo. Esta es, sin duda, una de las cosas que un cervecero debe evitar.
-
No cuidar la temperatura
Tener en cuenta la temperatura del sitio donde dejarás fermentar tu cerveza es fundamental. Probablemente, estás elaborándola en casa, y por lo tanto no cuentas con una una bodega o algo parecido. Entonces, procura al menos no dejarla en un sitio demasiado caluroso ni demasiado frío, ya que ello puede dañar la levadura.
-
No prestar atención al tiempo de fermentación
No porque ya no haya burbujas quiere decir que el proceso de fermentación esté completo. Lo más conveniente es usar un densímetro para asegurarte de que la fermentación ha terminado, antes de que comiences a embotellar. Es importante dejar reposar el lote para que, una vez que la levadura haya dejado de alimentarse de los azúcares y formar alcohol, los sedimentos se asienten en el fermentador.
-
Adelantarse a lo difícil
Antes de probar con recetas demasiado complicadas, prepara lotes básicos. Lo ideal es aprender los principios de la elaboración progresivamente. No solo obtendrás un buen producto si comienzas con cosas sencillas, sino que ello te ahorrará algunos disgustos y hará el proceso más disfrutable. Conforme domines algunas técnicas, podrás ir superando nuevos retos.
Leer también: Guía paso a paso para diseñar una receta de cerveza artesanal
-
No tomar notas
Si anotas lo que hiciste, qué usaste, cuándo lo hiciste y por qué, podrás tener los datos necesarios para valorar los logros y fallas en la elaboración de cada lote. Cuando pruebes tu cerveza, probablemente notes cierto sabor, color o textura que, a la próxima, te será más fácil modificar si tienes registrado cómo fue el proceso.
-
Beber la cerveza antes de tiempo
Más vale ser paciente y esperar a que esté lista. Una vez embotellada, la cerveza necesita tiempo para carbonatarse. Recuerda que se tratan de procesos químicos que requieren un tiempo preciso, así que espera el número de semanas que sean necesarios. Al final, obtendrás una mejor cerveza, de modo que piénsalo dos veces la próxima vez que invites a tus amigos a casa y estés ansioso por destaparlas y mostrárselas. Una de las cosas que todo cervecero debe evitar para ser mejor.
Fuente: How to Home Brew Beer